sábado, 20 de agosto de 2011

Pescador II

- ¡Humilde pescador, que utilizas tres anzuelos y ninguna carnada! ¿Por qué sigues intentandolo?

- Porque todos los días sale el sol.

- No te comprendo.

- Todas las noches, salvo raras excepciones, me visita la luna.

El merodeador, perplejo, siguió su curso.
El hombre de mar sintió el tirón en su caña y comenzó la escena.

No hay comentarios: